El tráfico marítimo de carbón alcanzó los 24 millones de toneladas en noviembre de 2012 y superaba a esa fecha en un 20 % el registro sobre todo el año anterior.
El resultado está vinculado, en gran medida, al acopio de mineral llevado a cabo por las empresas eléctricas para quemarlo en sus térmicas durante 2013 evitando el impuesto que entró en vigor el pasado 1 de enero.